Tarde o temprano surgirá una pregunta de tu hijo o hija preadolescente. O simplemente, tendrás que hablar del tema cuando notes una conducta extraña. ¿Por qué esperar tanto? Dejar una tarea tan delicada como la educación sexual solo a cargo del colegio o de Internet no es conveniente.
Como psicóloga, tengo muy claro que el sexo sigue siendo un tema tabú en las familias. Comprendo que buena parte de nuestra sociedad no se sienta preparada para hablar con naturalidad y sienta vergüenza para tratar este tema con los niños y adolescentes.
¿Qué es la educación sexual y por qué es importante hablar de sexo?
Sin duda, la educación sexual es un tema crítico en el desarrollo saludable de los niños y adolescentes. De hecho, no es una opción dejar de hablar sobre un aspecto tan natural que explota en la preadolescencia y les acompañará toda su vida. Como padre o madre, es natural que te preocupes por darle a tus hijos una orientación adecuada al respecto. Y, sobre todo, por abrir un espacio de diálogo en el que se sientan seguros y respaldados a la hora de hablar de este y otros temas. Sin embargo, hablar de sexo con los hijos puede ser un desafío, ya que implica superar barreras culturales, creencias erróneas, limitaciones y hasta temores propios.
En primer lugar, la educación sexual va más allá de transmitir información sobre anatomía y fisiología. Debemos asumirla como un proceso integral que busque promover la comprensión de la sexualidad como una parte natural y saludable de la vida humana. Una adecuada formación en materia de sexo implica enseñar a los niños y adolescentes sobre el cuerpo, las relaciones interpersonales y el consentimiento. También en torno a la prevención de enfermedades de transmisión sexual y el desarrollo de habilidades para tomar decisiones informadas y responsables.
Como dije líneas arriba, no es conveniente conformarse con lo que se enseña en el colegio y en el instituto. Lamentablemente, nuestro sistema educativo carece de un abordaje suficientemente profundo de este aspecto y se limita impartir los detalles fisiológicos. Menos conveniente aún es dejar que llenen ese vacío informativo consultando en Internet sin ninguna supervisión. En este ámbito, existen fuentes que pueden ofrecer visiones distorsionadas de la sexualidad, al igual que percepciones, actitudes y conductas nada edificantes.
Consejos para proporcionar una adecuada educación sexual a los hijos
A continuación, te invito a tomar buena nota de los siguientes consejos prácticos que ofrezco para abordar efectivamente el tema que nos ocupa:
- Crea un ambiente de confianza y apertura. Para empezar, establece una comunicación abierta y sincera para hablar de sexo con tus hijos. Asegúrate de que se sientan cómodos y en confianza al expresar sus dudas y preocupaciones. Evita juzgar o criticar sus preguntas y comentarios, y fomenta un ambiente de respeto mutuo.
- Inicia las conversaciones de manera progresiva. Ciertamente, la educación sexual no es un tema que deba abordarse en una sola conversación. Es preferible comenzar con información básica adecuada a la edad del niño y luego ir profundizando gradualmente a medida que crezcan y maduren. Puedes aprovechar situaciones cotidianas, como cuando veis juntos programas o noticias en la tele que aborden de alguna manera el tema, para iniciar las conversaciones.
- Sé un modelo de comunicación saludable. Precisamente, los padres y madres son los principales modelos para sus hijos, incluso en temas relacionados con la sexualidad. Por eso, debes mostrar una actitud abierta y positiva hacia el sexo, evitando comentarios nocivos o tabúes que puedan transmitirles mensajes erróneos. Recuerda que tu enfoque y actitud influyen en la percepción que tus hijos tendrán sobre la sexualidad y en su capacidad para hablar del tema.
¿Cuándo empezar a implementar la educación sexual para los hijos?
A decir verdad, no existe una respuesta única a esta pregunta, ya que cada niño y cada familia son diferentes. Aun así, aquí te doy algunas sugerencias a tener en cuenta para impartir educación sexual a tus hijos en diferentes etapas:
- Empieza cuanto antes con información básica. Desde temprana edad, los niños comienzan a hacer preguntas sobre sus cuerpos y las diferencias entre hombres y mujeres. Aprovecha estas oportunidades para proporcionar información simple y precisa, acorde a su nivel de comprensión. Habla sobre las partes del cuerpo y sus funciones de manera apropiada para su edad y responde sus preguntas de manera honesta y directa. En el caso de niños más pequeños, puedes apoyarte en libros ilustrados y didácticos que puedes leer con ellos.
- Adapta la información a medida que crecen. De forma progresiva, es importante adaptar la educación sexual a medida que los hijos crecen, maduran y enfrentan nuevos desafíos. Cuando estén llegando a la preadolescencia y la adolescencia, incluye información más detallada sobre la pubertad, los cambios físicos, las emociones y las relaciones. Asimismo, prepárate para tratar temas como la masturbación, el placer, la prevención de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual de manera adecuada a su edad.
- Debes ser sensible a las señales y preguntas de tus hijos. Ellos te indicarán cuándo están listos para obtener más información o profundizar en ciertos temas. Al respecto, debes permanecer atento a las señales, como preguntas específicas o situaciones en las que puedan requerir una mayor orientación. Sé receptivo y responde de manera precisa y comprensible, sin sobrecargarlos con información innecesaria.
- Contesta siempre a las preguntas que te hagan y contesta con la verdad, si tu hijo o hija intuye que dar rodeos para contestar, te asustas o no le dices la verdad, pensará que de «esto no se puede hablar» y no te volverá a preguntar.
¿Necesitas ayuda para hablar de sexo con tus hijos?
Espero que estos consejos y orientaciones sobre cuándo y cómo implementar la educación sexual para tus hijos te resulten útiles. No obstante, esto es tan solo una brevísima guía introductoria. Hablar con tus hijos sobre este tema delicado requiere de mucha investigación y preparación. Si crees que necesitas orientación adicional o surgen situaciones más complejas, no dudes en buscar apoyo profesional. En este sentido, puedo ayudarte.
Soy Mercedes Cimas, psicóloga clínica especialista en adolescentes y con más de 15 años de experiencia. Lo mismo puedo orientarte con este tema de la educación sexual, como tratar toda clase de problemas de conducta, adicciones y traumas que presenten tus hijos. Utilizo la terapia breve cognitiva y la terapia indirecta para adolescentes, porque son metodologías probadas que generan resultados efectivos. Si estás interesado/a en alguno de mis talleres para familias, profesores y alumnos, contacta conmigo.