Gracias a mi experiencia como psicóloga clínica especializada en comportamiento adolescente, he comprobado de primera mano cómo afecta negativamente el aislamiento social a los adolescentes. Los adolescentes son hipersensibles a la exclusión social, y esto puede tener un profundo impacto en su salud mental y bienestar. En especial, los chavales entre los 11 y los 16 años son quienes peor lo llevan. Para ellos, parece que no hay algo más importante que encajar en su entorno, con su grupo de iguales. No encajar puede marcarlos significativamente e influir en su vida adulta.
¿Qué es y cómo afecta el aislamiento social a los adolescentes?
El aislamiento social es el estado de soledad o falta de compañía. Lo sufren personas de todas las edades, pero puede ser especialmente perjudicial para los adolescentes. Con frecuencia, un adolescente se aísla después de experimentar determinadas situaciones, acompañadas de un estado de estrés permanente. Por ejemplo, el confinamiento durante la pandemia del COVID-19 impulsó este fenómeno. Sin embargo, hay otros factores desencadenantes relacionados con la misma interacción social, como el bullying y la exclusión. Esto puede crear en los jóvenes sensaciones de agobio y la convicción de no ser comprendidos.
De por sí, los chavales en esta etapa suelen ser más susceptibles. Por tanto, la forma en que afecta el aislamiento social a los adolescentes es muy evidente. Esto se debe a que están atravesando un periodo crítico de desarrollo social y emocional. Están intentando averiguar quiénes son y dónde encajan, y para ello necesitan la interacción social. Cuando los adolescentes están socialmente aislados, pierden importantes oportunidades de aprender y crecer.
¿Cómo sería el desarrollo individual si no afectara el aislamiento social a los adolescentes?
Las primeras habilidades sociales se desarrollan en la infancia mediante la interacción con otros niños y la observación. Estas habilidades ayudan a los niños a establecer relaciones sanas, comunicarse eficazmente, expresar sus emociones y gestionar los conflictos. Durante esta primera etapa, los padres y otros cuidadores desempeñan un papel vital en la enseñanza de estas habilidades.
Cuando los niños entran en la adolescencia, sus familias pasan a un segundo plano y sus compañeros adquieren cada vez más importancia. Los amigos y el sentimiento de pertenencia a un grupo desempeñan un papel fundamental en el desarrollo del adolescente. Durante esta etapa, los adolescentes son capaces de comprender mejor los conceptos abstractos, tomar decisiones que implican un mayor riesgo y procesar la información con mayor eficacia.
A lo largo de esta etapa, cuando no afecta el aislamiento social a los adolescentes, los jóvenes pueden desarrollar las siguientes habilidades sociales:
- Asertividad o capacidad de expresarse claramente, así como de defenderse a sí mismos y sus creencias sin agredir a nadie.
- Apego. Entendemos este como la capacidad de establecer relaciones estrechas con los demás.
- Autocontrol. Es decir, la habilidad de controlar las emociones y su comportamiento.
- Empatía. Esta es la capacidad de comprender los sentimientos de los demás.
- Comunicación. Esta es la destreza para expresarse con seguridad y eficacia.
- Resolución de conflictos. Ciertamente, esta es la práctica de resolver desacuerdos de forma pacífica y constructiva.
- Toma de decisiones: Es el primer escenario donde se ejercita la toma de decisiones, sin la supervisión de un adulto.
Durante la adolescencia, la interacción social es esencial para un desarrollo sano. Los adolescentes necesitan aprender a interactuar con los demás, establecer relaciones y resolver conflictos. El aislamiento social puede dificultar que los adolescentes desarrollen estas habilidades, lo que puede acarrearles problemas en su vida personal y académica.
¿Cómo saber si está afectando el aislamiento social a los adolescentes?
En concreto, podemos detectar una serie de conductas y factores que nos permiten identificar cuando puede estar afectando el aislamiento social a los adolescentes:
- Depresión. Los adolescentes que están socialmente aislados tienen más probabilidades de sufrir depresión. La depresión es un trastorno mental caracterizada por un estado de tristeza permanente y falta de interés por las tareas habituales o por aprender nuevas. En este caso, las conductas depresivas pueden darse por los cambios que se producen en la estructura de la corteza prefrontal durante la adolescencia. Las mismas suelen manifestarse con problemas académicos y hasta con pensamientos y comportamientos suicidas.
- Ansiedad. La ansiedad es un sentimiento de preocupación o miedo que puede ser abrumador y debilitante que es común en adolescentes socialmente aislados. Aunque, en general, afecta a parte de la mal llamada generación de cristal.
- Bajo rendimiento académico. En efecto, los chavales que experimentan el problema que nos ocupa son más propensos a tener problemas para concentrarse en clase, completar tareas o entablar relaciones con sus profesores y compañeros. Esto trae como resultado bajas calificaciones y constantes llamados de atención por parte de profesores y directores en el instituto.
- Aumento del riesgo de abuso de sustancias. Lamentablemente, el consumo de drogas y alcohol figura como uno de los posibles efectos del aislamiento social en adolescentes. El abuso de sustancias puede tener como consecuencia problemas como la adicción, trastornos de salud y conductas reñidas con la ley.
¿Cómo evitar y contrarrestar los efectos de este problema en tu hijo adolescente?
Sin duda, como padre o madre puedes hacer mucho para ayudar a tus hijos adolescentes a evitar el aislamiento social. Una de las iniciativas más importantes es asegurarte de que tengan muchas oportunidades de socializar. Esto puede incluir apuntarles en actividades extraescolares: deportes, música, trabajo voluntario u otras. También, animarles a hacer amigos entre sus compañeros de clase o simplemente dedicarles tiempo de calidad y estar con ellos en familia.
Asimismo, es importante hablar con los adolescentes sobre la importancia de la interacción social. Explicarles que tener amigos es importante para su salud mental y emocional. Ayúdales a entender que no pasa nada por ser diferente y que hay gente que les aceptará por lo que son.
No abuses del castigo de quitar el móvil ya que hoy en día es aislarle, el móvil debe de ser retirado si se hace un uso indebido de él, pactando cuanto tiempo de retirada es para que aprenda a hacer buen uso, no debe retirase por otros errores no relacionados con el dispositivo.
Por último, si detectaste tarde el problema y sientes que no tienes capacidad de solucionarlo, es mejor buscar ayuda profesional. Contáctame y te ayudaré a comprender la causa del aislamiento social de tu hijo y a desarrollar estrategias para afrontarlo. Soy Mercedes Cimas, psicóloga clínica con más de 15 años de experiencia y especialista en terapia indirecta para adolescentes. Puedo atenderte en mi consulta de Palma de Mallorca o vía online, sin importar desde donde te conectes. Como dije al principio, conozco cómo afecta el aislamiento social a los adolescentes y puedo garantizarte resultados en seis sesiones para este y otros casos.